Los partidos políticos actuales con su permanente miopía son incapaces de llegar a un acuerdo que les permita gobernar. Solo prevalece el interés de sus lideres para mantenerse en el poder de sus partidos y así no tener que afiliarse al paro. Mientras tanto los españoles permanecen indiferentes ya que cada vez desconfían más en sus gobernantes que han demostrado hasta la saciedad que lo único que han perseguido hasta ahora ha sido destruir la fe católica en España mediante leyes impías, destruir la unidad de la nación española dando dinero de forma ilimitada a las autonomías separatistas y permitiéndolas todos los actos que en cualquier país occidental se habrían castigado como traición.
A cambio de su docilidad a los mandatos de sus logias se les ha permitido a esos partidos saquear España sin ningún pudor y si se aplicasen las leyes fiscales españolas que regulan los incrementos no justificados de patrimonio una gran parte de los políticos españoles iría a la cárcel.
Mientras los partidos políticos españoles, todos impíos, se dedican a acusarse mutuamente: "tu más" "tu has robado más", España permanece indefensa, sin ejército, sin recursos financieros para la defensa, sin valores morales de ninguna clase y ante el peligro de un ataque exterior responden todos los políticos que como pertenecemos a mamá OTAN ante cualquier agresión, la OTAN nos defendería. No saben, o así lo simulan, que si eso ocurriese estarían encantados de ver destruida España.
España, la nueva Israel, sufrirá lo que a lo largo de su historia sufrió esta nación: mientras fue fiel a Dios y a sus mandatos fue grande y próspera, cuando se apartó del buen camino Dios permitió fuese castigada por sus permanentes enemigos.
Mientras tanto Europa embrutecida por la codicia, el sexo, los vicios de todo orden se encuentra moralmente indefensa ante el diluvio que se avecina.
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